Por segunda vez consecutiva, River mantuvo el arco invicto, algo que en este 2015 únicamente había logrado al hilo en febrero cuando ganó la Recopa frente a San Lorenzo. Si bien no ganó, es bienvenida la fortaleza de abajo.
Hay un cero que sirve. Un cero que, paradójicamente, suma. Se trata del que conservó Marcelo Barovero otra vez, tal como lo hizo el jueves pasado en el Superclásico. Fue la séptima ocasión oficial en lo que va del año, tercera correspondiente al Campeonato de Primera División.
¿Las anteriores oportunidades de River sin conceder tantos en el 2015? Las tres victorias 1-0 sobre San Lorenzo, el mismo marcador ante Godoy Cruz y Boca, así como el éxito 3-0 frente a San José, siempre con Trapito como responsable de custodiar los tres palos, salvo cuando Julio Chiarini actuó contra el Tomba.
Hoy, en la igualdad 0-0 ante Racing, Barovero tuvo poca acción. Contuvo un zurdazo débil de Brian Fernández y un derechazo de Santiago Nagüel. Ambos fueron remates desde afuera, uno en cada etapa. Por lo tanto, tuvo una tarde noche demasiado tranquila, amparado también en una línea de tres que transmitió mucha seguridad.