En febrero del 2021, River cerraba la venta de Santiago Sosa al Atlanta United de la MLS a cambio de cinco millones de euros. Cuatro años después, el futbolista surgido de las inferiores del Millonario volvió a Argentina para vestir la camiseta de Racing, club en el cual se destacó rápidamente a tal punto de convertirse en una de las grandes figuras del equipo de Gustavo Costas.

Poco después de su regreso al país, el volante central de 26 años reconoció que River contó con la chance de repatriarlo cuando todavía no estaba en el radar de La Academia. Incluso, llamó al club con el fin de comenzar a construir puentes para su regreso pero se encontró con una contundente respuesta: no le atendieron el teléfono.

En las últimas horas, Sosa recordó aquel episodio y envió un nuevo tiro por elevación con rumbo a Núñez sin aclarar para quien iba dirigido. No obstante, según pudo saber La Página Millonaria se trata de Leonardo Ponzio, secretario técnico del club quien le habría hecho caso omiso a la llamada que recibió desde Estados Unidos.

“Ya expliqué en su momento lo que pasó. Simplemente me molestó eso. Tenía una linda relación con una persona, no pudimos hablar por teléfono. Fue lo único que me dolió en ese momento, porque si me atendía y me decía ‘hoy no estás en condiciones de ponerte esta camiseta’, yo lo iba a entender y respetar su opinión”, manifestó el mediocampista de Racing, quien compartió plantel con Ponzio e incluso jugó nueve veces con él, en diálogo con TyC Sports.

De todas formas, el platense aseguró que no siente rencor por lo sucedido. “Ya quedó atrás, no guardo ningún tipo de rencor. No poder hablar por teléfono fue lo único que a mí me dolió en ese momento, pero no guardo ningún tipo de rencor. Agradezco porque hoy estoy viviendo todo esto porque vine a Racing, si hubiera ido a River no sé si hubiese pasado lo mismo“, agregó.

¿Le abrió la puerta a un posible regreso a River?

Por otro lado, a Sosa le preguntaron acerca de su futuro en La Academia y no le cerró la puerta a una posible salida a fin de año. Al especto, reconoció: “Por ahora estamos bien, a fin de año veremos qué pasa, qué sucede, si llegarán ofertas… Yo estoy muy cómodo acá pero uno a fin de año toma decisiones, hace un balance de lo que fue el año, ver que quieren desde el club y entre todos llegar a lo que queremos”.

El futbolista cuenta con contrato hasta fines del 2027 y una cláusula de rescisión de 12 millones de euros, aunque, según distintos reportes, Racing buscaría aumentarla para blindarlo ante el interés que habría despertado en otros clubes.