Diego Latorre fue honesto y brutal con su mirada sobre Marcelo Gallardo y su River en y luego de la derrota en el Superclásico con Boca. Habló de un entrenador poco audaz y de un equipo que no está lo suficientemente entrenado. Habló también de improvisaciones del Muñeco, aunque subrayó: “No todo está ligado siempre a lo que haga un entrenador. Los jugadores tendrán que sacar algo también para ayudar y hacer un esfuerzo para devolverle la confianza”.

La fuerte declaración de Diego Latorre en el análisis de Gallardo y River tras la derrota con Boca

Es la reiteración de lo que ha sido River durante ya largo tiempo, un equipo inseguro, muy inseguro, estos planes de contingencia que ha armado Gallardo para determinados partidos… está demostrado que en el fútbol es mucho más confiable seguir una línea futbolística, pero cuando vos te desviás del camino y confiás más en un orden táctico, en neutralizar al rival es mucho más contraproducente que, con todos los altibajos que puede tener un equipo, seguir una línea, tener una identidad.

River parece un equipo poco entrenado”

No ha sabido desarrollar Gallardo una idea clara y eficiente durante todo este año y parece un equipo poco entrenado, que vive de las improvisaciones. Y digo poco entrenado desde algunas acciones de juego, o sea, un equipo que se sostiene solo desde la táctica.

La confusión a veces te lleva a estar perdido dentro de la cancha, pero de armar según el rival, uno espera que en los momentos límite un entrenador como Gallardo tome decisiones un poco más audaces y no tan temerosas o pensando en cómo anular al rival, porque todos sabemos en el fondo que un equipo cuando está bien, no digo que un rival se neutraliza solo, pero ya el mismo funcionamiento de un equipo vivaz, dinámico, con confianza, logra que los puntos débiles del rival se atenúen. En cambio, cuando vos jugás solamente para controlar al rival, lo más probable es esto. Además, apoyado en un estado de ánimo muy endeble, muy endeble. ¿Por qué? Porque al primer contratiempo, enseguida el equipo se desmorona. Entonces, es una conjunción de cosas.

Marcelo Gallardo y una crisis impensada como DT de River.

Yo creo que el estado de ánimo es fundamental para jugar al fútbol porque las respuestas no siempre son individuales o tácticas, las respuestas tienen que ser colectivas y cuando un equipo no tiene ese sustento todo se desvanece rápidamente. Entonces, estos continuos cambios que ha hecho, de no encontrar el equipo, jugadores que vos les das confianza, por ejemplo, a un jugador como Castaño, se mantiene en el equipo durante tanto tiempo ¿y después a otro lo estás mirando con la lupa? cuando Castaño no mete pases gol, no es un jugador que se suelte y arrime al área, mucho menos pensar en hacer goles, es un jugador que tiene cierto criterio para pasar la pelota… bueno, vos ya estás definiendo ahí que él… volante no es, volante ofensivo no es, puede ser un buen 5, un 5 de esos que juegan por detrás de la pelota, entonces me parece que ahora la urgencia lo fue atrapando, las decisiones se han tomado en función de esa desesperación por querer encontrar algo que te dé optimismo en el equipo, entonces ahora no es solo el jugador, no es solo lo táctico, sino tenés un conjunto de cosas que rodean a River y el panorama que se visualiza es oscuro porque tenés el próximo partido con Vélez cuando vos venís arrastrando este problema durante… no sé, un tiempo… ¿Seis meses? ¿Ocho meses? Perdiste de local contra Sarmiento, contra Riestra, no le podés ganar a Platense ni a Gimnasia también de local, lo que habla de una fragilidad, una debilidad para hacerte cargo de los partidos, además.

Castaño está en deuda en River.

Entonces, ¿desde qué lugar uno puede sospechar? Y bueno, desde el lugar de que va a haber una victoria y porque el fútbol tiene estas cosas, porque los jugadores tendrán que sacar algo también para ayudar, porque yo creo que si el entrenador no es capaz de tener confianza con el jugador, el jugador también tiene que hacer un esfuerzo para devolverle esa confianza, no todo está ligado a lo que haga un entrenador porque el jugador cuando entra a la cancha tiene el escudo y tiene que sentir que soluciona dentro de la cancha algunos problemas que no dependen del entrenador, porque todo lo que pasa en un partido no depende del entrenador; depende también de los jugadores y bueno, ahí habrá que ver si los jugadores, algunos, en la adversidad son capaces de ponerse una camiseta que demanda tanto como la de River.

“Raro”

Latorre criticó la decisión de Marcelo Gallardo de no hablar y exponer a los jugadores ante la prensa tras la derrota con Boca.