El empate entre River y Monterrey dejó mucho para hablar, principalmente por la superioridad en el juego marcada por Marcelo Gallardo y las oportunidades desaprovechadas para ponerse por delante en el marcador. Sin embargo, en el transcurso del partido se dio un hecho que despertó la queja de todos los hinchas: Gonzalo Montiel recibió un planchazo en el cuerpo que no fue revisado por el VAR.

A los 18 minutos del primer tiempo, cuando los equipos estaban en una etapa de medirse para encontrar los espacios y generar peligro, Jorge Rodríguez fue a disputar una pelota con Cachete. Fue allí que el ex Banfield y Estudiantes dejó la pierna levantada y le clavó los tapones directo en el abdomen del lateral.

Mientras la transmisión de TV repetía la jugada, dejando en claro que era una jugada de expulsión, el Muñeco y los jugadores se acercaron a los jueces para protestar para que el VAR haga lo suyo. Los segundos pasaron y el árbitro Slavko Vincic nunca recibió el llamado para detenerse ante una posible tarjeta roja.

Una voz autorizada dijo que River fue perjudicado

Miguel Scime, director del Instituto de Formación especializado en Arbitraje, ex réferi y asesor FIFA, analizó en Infobae la incidencia y dejó en claro su punto de vista: Un grosero error del VAR, ya que Corcho Rodríguez debió ser expulsado por el punto de contacto y el uso de fuerza excesiva”. Más allá de esto, el español Carlos del Cerro Grande y el francés Jerome Brisard, encargados del VAR y AVAR, respaldaron la decisión de Vincic.

“‘Con uso de fuerza excesiva’ es la acción en la que el jugador se excede en la fuerza y la impetuosidad empleada o pone en peligro la integridad física del adversario, por lo que deberá ser expulsado”, menciona la Regla 12 de la IFAB (International Football Association Board). El árbitro tuvo que haber observado la acción detenidamente y tomar otra medida con el futbolista de Rayados.

Pasan las horas y queda la molestia de la jugada, principalmente porque transcurrían apenas los 18 minutos del partido y quedaba mucho tiempo por jugar. En ese caso, River hubiese tenido un hombre más para atacar con mayores facilidades, pero el juez esloveno no lo quiso de esa manera. Finalmente, fue el Millonario el que se quedó con diez sobre el cierre por la roja a Kevin Castaño.