En enero de 2018, River realizó una gran inversión en el mercado de pases y sumó a cuatro futbolistas: Franco Armani, Juan Fernando Quintero, Bruno Zuculini y Lucas Pratto. Este último fue el jugador más caro que el club pagó en toda la historia.

La Banda acordó pagar 11.500.000 euros por el 100% de los derechos económicos y federativos. Incluso, en la transferencia, El Más Grande se comprometió a pagar un bono por objetivos: como Pratto terminó ganando la Copa Libertadores 2018, debió abonar 1 millón de euros más.

Más de un año y medio después de aquella compra, en noviembre pasado, el conjunto brasileño acudió a la FIFA para exigirle a River que pague los 4 millones de euros que debe por el Oso. En las últimas horas, el Tricolor volvió a  reclamarle a la máxima entidad del fútbol internacional. Esta vez fue por un pago no realizado a fines de septiembre, fijado en un monto de 2 millones de euros.

¿Qué puede pasar? De acuerdo al medio Globo Esporte, la FIFA podría imponerle una multa al Millonario. La misma oscila entre el 15% y el 20% de los 4 millones de euros que todavía le debe a San Pablo.