Cada vez falta menos para que se ponga en marcha un nuevo semestre para River. En poco menos de una semana, precisamente en cinco días, el Millonario hará su presentación en los octavos de final de la Copa Libertadores ante Argentinos Juniors en el Monumental y por eso Gallardo desea contar con la mayoría del plantel disponible lo antes posible. La delegación regresó el lunes de Estados Unidos y desde el martes están inmersos en una burbuja sanitaria en Cardales que se mantendrá por una semana. Junto con todos los futbolistas que estuvieron en Orlando, también se sumaron los que por distintos motivos no formaron parte de la pretemporada.

 

 

El miércoles llegaron Robert Rojas, David Martínez, ambos después de jugar la Copa América con Paraguay, Braian Romero tras la firma de su contrato y también Lucas Beltrán, que no pudo viajar a Estados Unidos por no haber cumplido el aislamiento obligatorio. Ayer, durante la jornada de doble turno, también se sumó Leonardo Ponzio luego de que los estudios arrojaran que está recuperado de la miocardítis que lo marginó de las prácticas por 10 días y, a excepción de Álvarez, Armani y Montiel que mañana jugarán la final de la Copa América con Argentina, solo quedaba Nicolás De la Cruz por sumarse.

Llegó De la Cruz a la burbuja

El uruguayo volvió a la Argentina hace algunas horas y ya se sumó a la burbuja en Cardales, donde hoy tuvo su primer entrenamiento. Los médicos van a seguir de cerca su evolución ya que arrastra una sobrecarga muscular en el isquiotibial izquierdo que lo obligó a perderse los cuartos de final de la Copa América ante Colombia y que también lo pone en duda para estar en la ida de los octavos ante Argentinos Juniors.