En agosto de 2020, River comenzó con una reestructuración a fondo del campo de juego del Estadio Monumental, con el objetivo de mejorar la calidad del mismo y tener uno de los mejores césped de América. Toda esta ingeniería se realizó tomando en cuenta la prohibición del ingreso de público debido a la pandemia y también saber que el Antonio Vespucio Liberti será la sede principal de Argentina para la próxima Copa América que se llevará a cabo a mediados de este año.

Entre las varias modificaciones que se hicieron en el campo, se lo bajó 1.80 metros para dejarlo nivelado plenamente al ras y también se colocaron unas grandes zanjas que llevan caños de última generación para optimizar el drenaje durante los días de lluvia. River debutó en el renovado campo de juego el 20/02 ante Rosario Central y desde allí disputó dos partidos más, ante Argentinos Juniors y el último frente a Racing, dejando la sensación de que todavía no se pudo adaptar al nuevo césped.

En la conferencia de prensa que brindó este miércoles en Ezeiza, Marcelo Gallardo dio su opinión acerca de los cambios en la cancha y expresó: "Nuestro campo está perfecto para jugar por abajo, tenemos que agarrarle la mano". 

Y también agregó: "Hay que ir adaptándose, ir pisándolo porque este es diferente. Es cuestión de tiempo pero está bueno adaptarse a las buenas cosas, en querer evolucionar en el buen sentido. No creo que haya un jugador al que no le guste jugar en un buen campo de juego. Cuando hablaba de subir el nivel del fútbol argentino, me refería a estas cosas".